preparación y cultivo kéfir
Preparación:
· Un tarro de 1 litro con tapa.
· ½ litro de Leche preferiblemente entera.
· Hongo Kéfir de Leche.
· Un colador no metálico.
Se introducen en el tarro la leche y el kéfir, se cierra y
se deja a temperatura ambiente durante 24-36 h. Tras este tiempo, se cuela el
líquido resultante y se vuelve a repetir el proceso. El líquido obtenido es una
bebida alcoholica de baja graduación (menos del 1%), carbonatada de
consistencia similar al yogur aunque con una textura más suave y sabor
ligeramente más ácido; si no gusta, se le puede añadir azúcar, canela o miel.
Cultivo de Kéfir de Leche
La mayor parte de las veces el producto comercializado como
«kéfir» carece tanto de alcohol como de gas carbonico, y en realidad es yogur.
El kéfir debe estar siempre en leche.
El kéfir no debe entrar en contacto con utensilios
metálicos, especialmente aluminio o cobre. Se puede preparar la cantidad de
kéfir querida, siempre que en el tarro quede 1/3 de aire. El motivo es que
durante la fermentación, se da lugar a una presión de gas que aumenta a medida
que sube la temperatura.
Los utensilios usados (recipiente y colador), que no sean de
aluminio, porque este material no es estable en un medio ácido, como el kéfir,
y podría transferirle partículas nocivas.
Hay numerosas recetas que usan la leche kefirada para hacer
quesos de untar, queso sólido, ensaladas… Existen variaciones según el modo de
preparación. El kéfir aguado (o kéfir de agua) se produce a partir de agua con
azúcar, frutas deshidratadas o frutos secos y jugo de limón.
Aún no se ha conseguido producir leche kefirada de forma
industrial, ya que el Kéfir es bastante inestable, hay veces que fermenta la
leche antes, otras veces tarda más, puede morir… por ello, la mayor parte de la
producción de leche kefirada es artesanal.
Conservación mientras fermenta:
Temperatura: La temperatura adecuada oscila
entre 23ºC y 28ºC.
Luz: Preferiblemente sin luz, aunque puede estar
en claridad sin luz directa del Sol.
Tiempo de fermentación: Generalmente entre 24 y
36 horas y 48 para una bebida mas astringente.
Conservación:
Si nos tenemos que ausentar por unos días, se pueden dejar
los gránulos en la nevera, se puede conservar metidos en agua sin cloro y con
azucar durante unas semanas para su conservación.
Por más largo tiempo, se los puede congelar(se limpia bien y
se escurre, se introduce en una bolsa de plástico y se congela. Así aguanta
mucho tiempo).
Para descongelarlo, se saca del congelador y se prepara
kéfir de leche durante tres días, desechando este primer kéfir.
CÓMO SECARLOS: El proceso de secado de los
gránulos de kéfir, tanto los de leche como los de agua, es como sigue: Se
extienden sobre un plato. Se cubren con una servilleta de papel y se colocan en
un lugar ventilado. Cada día se remueven los gránulos, para ir despegándolos
del plato, con cuidado de no romperlos. El tiempo que tarden en secarse
dependerá de la ventilación y la humedad ambiental. Se sabrá si están
completamente secos, cuando se los note como cristalizados y nada pegajosos.
Así se pueden meter en una bolsita y ser enviados en un sobre acolchado,
franqueándolo como simple carta, por lo que se evitarán gastos de envío.
(Pueden durar hasta 3 meses secos).
CÓMO HIDRATARLOS: Los gránulos del kéfir de agua
se pondrán en agua a temperatura ambiente para que adquieran su consistencia
gelatinosa. Los gránulos del kéfir de leche es preferible cubrirlos de leche y
renovarla hasta que los gránulos adquieran su textura gelatinosa y veamos que
espesa la leche donde están sumergidos. se introduce el kéfir en leche durante
2 semanas, renovando la leche cada 2 días. Después de estas 2 semanas podremos
preparar kéfir de leche normalmente.
https://comprarkefir.wordpress.com/preparacion-y-cultivo-de-kefir/
Preparación:
· Un tarro de 1 litro con tapa.
· Hongo Kéfir de Agua.
· 80 gramos de azúcar (2 – 3 cucharadas soperas).
· 20 gramos de frutos secos (Pasas, higos, ciruelas,
albaricoques).
· ½ limón entero
· ½ litro de agua pura (No utilizar agua de grifo)
· Un colador no metálico (El metal i el Kéfir no son
compatibles).
Cultivo de Kéfir de Agua
Disolver 2-3 cucharadas soperas de azúcar en ½ litro de
agua. Añadir el Hongo Kéfir de Agua. Añadir posteriormente el ½ limón y los
frutos secos que desee (los frutos secos se utilizan para neutralizar la
fermentación alcoholica y saborizar).
Una vez todos los ingredientes están introducidos debemos
tapar el tarro con un trapo o papel de cocina limpio.
Debe dejar fermentar el agua al menos 1 día pero menos de 4
para que la bebida no quede amarga. Podemos probarla para saber que medida es
la que deseamos.
Extraer los frutos secos y el ½ limón y colar el agua de un
tarro a otro separando asi el hongo del agua fermentada. Posteriormente puede
volver a repetir el mismo proceso limpiando previamente el tarro de restos que
hayan podido quedar.
Conservación mientras fermenta:
Temperatura: La temperatura ideal es de unos
20ºC.
Luz: Preferiblemente sin luz, aunque puede estar
en claridad sin luz directa del Sol.
Tiempo de fermentación: 24 horas (Efecto
Laxante) y entre 36 y 48 horas para regular y reestablecer la función
intestinal.
Conservación:
Mantenidos bajo cultivo periódico, los nódulos pueden vivir eternamente
y su reproducción nos asegura provisión permanente. Si debe interrumpirse el
cultivo periódico por viajes o ausencias, hay técnicas para preservar el estado
de los nódulos.
En húmedo (por algunos días): Por una semana se
pueden dejar los nódulos en agua azucarada, dentro de un recipiente cerrado y
con suficiente espacio vacío. Para reactivarlos, se los enjuaga brevemente y se
inicia el cultivo. Por una semana también se los puede congelar, siempre que
estén bien escurridos y colocados en una bolsa de plástico o frasco de vidrio.
Mientras más baja sea la temperatura de congelamiento, mejor se mantienen sus
propiedades. Para reactivarlos conviene macerarlos 12 horas en agua azucarada
antes de iniciar el cultivo.
En seco (varios meses): Para secar los nódulos
de kéfir, se extienden sobre un plato, se cubren con una servilleta de papel y
se colocan en un lugar ventilado. El tiempo de secado dependerá de la
ventilación y la humedad ambiente. Están bien secos cuando se los nota
cristalizados y nada pegajosos. Así pueden durar varios meses. Para hidratar
los nódulos secos, bastará ponerlos en agua azucarada a temperatura ambiente,
durante 12 horas.
Preparación:
· Un tarro de 1 litro.
· Hongo Kéfir de te (Kombucha).
· 6 cucharaditas de azúcar.
· 2 cucharadas de té verde (O el té que prefieras).
· 1 cucharadita de cualquier otro té que prefieras
(opcional).
· Un colador no metálico.
Cultivo de Kombucha
Antes que nada debe hervir ½ litro de agua y posteriormente
agregar el té al agua. Dejar descansar 15 minutos. Debe dejar enfriar el agua a
temperatura ambiente hasta que esté templada.
Posteriormente debe añadir las 6 cucharaditas de azucar y
mezclar bien. Después añadir el Hongo Kéfir de té (kombucha).
No importa si el hongo se hundo o no, el nuevo hongo crecerá
en la superficie del agua. Tapar el tarro con un trapo o un papel limpio. Dejar
el recipiente fermentando en un lugar templado de 5 a 7 días. Este tiempo
dependerá del tamaño del hongo y del punto de fermentación que desee. Revisar
temporalmente durante la fermentación que no se creen burbujas de aire
excesivamente grandes debajo del hongo, ya que puede levantarlo y secar las
partes superiores del Hongo Kéfir de té. En este caso conviene hundir el hongo
para dejar salir el aire. Pasado este tiempo puede colar su bebida separando el
Hongo del agua. Puede guardar en botellas el te y guardarlo en su frigorífico
para su posterior consumo. Y ya puede volver a repetir el proceso.
El Kéfir de té es una bebida viva, de manera que seguirá
generando gas hasta su consumo.
Conservación mientras fermenta:
Temperatura: La franja ideal es de unos 23 a
27ºC.
Luz: Preferiblemente sin luz, aunque puede estar
en claridad sin luz directa del Sol.
Tiempo de fermentación: Entre 8 y 12 días se
produce la fermentación. Puede entonces guardar su té en el frigorífico y
repetir el proceso.
Conservación:
Cuando toque la kombucha lave bien sus manos y utensilios y
quítese cualquier anillo. El cultivo podría contaminarse y arruinarse.
La kombucha se puede lavar con agua. Para cultivar la
kombucha no utilice recipientes de aluminio, cobre, lata, hierro ni arcilla.
Tampoco envases que contengan hule, goma o PVC; que estén agrietados o sucios o
que hubieran sido utilizados anteriormente con otras sustancias. El tipo de
plástico más seguro es el de “grado alimenticio” duro, que puede ser utilizado
para almacenar alimentos húmedos y ácidos en la heladera.
Hasta cierto grado la kombucha se preserva a sí misma.
Cualquier microorganismo que no pertenezca al cultivo será destruido por el
ácido acético y el ácido láctico. Las levaduras del cultivo de kombucha
producen dióxido de carbono (gas con propiedades antimicrobianas) así como
alcohol (preservante universalmente conocido).
En caso de que el organismo principal se dañe con algún moho
siempre mantenga guardado un trozo de kombucha en el frigorífico (reemplácelo
cada año, para tener siempre kombucha fresca).
Evite los extremos de temperatura. La kombucha crece mejor
en un ambiente cálido, como la cocina. Pero no lo acerque demasiado a las hornallas
o al horno, porque mataría las bacterias benignas. Nunca caliente la kombucha.
El polvo y las pelusas que flotan en el aire contienen
bacterias que pueden contaminar su cultivo. También se pueden introducir
insectos. Cubra bien la kombucha y asegure los bordes de la tela con un
elástico.
Evite que el cultivo se contamine con el humo del
cigarrillo: la nicotina destruye el organismo.